domingo, 1 de julio de 2012

Cuando este capítulo empezó

nos encontrábamos en un universo distinto, en un lugar donde la tranquilidad reinaba y el estrés no existía. Donde la vida -la vida!- no era un problema, donde todos vivíamos la vida en condiciones iguales. Donde la vida era un paseo, porque no sólo habían más cosas por hacer, sino porque además de alcanzarnos el tiempo para hacerlas, de hecho hacíamos otras cosas aparte de LA VIDA.

La vida era tan color de rosa, que no nos importó lo que sucedía en nuestro alrededor. No, porque sólo supimos 3 años después que otras cosas habían sucedido. ¡Y qué vergüenza sentimos cuando nos enteramos!

En estos días, sin embargo, la historia es distinta. Nos encontramos en un mundo esencialmente opuesto al que habitábamos esos días. Reina el estrés y la intranquilidad, quizás lo más importante de todo -y quizás la raíz de la existencia de este extraño mundo- es que la motivación dejó de existir. Ya no somos nosotros sino que solamente soy yo.

La última afirmación parece ser obvia pero no lo es. Permítanme al menos afirmar que es, por lo pronto, contra intuitiva. Cómo probablemente los pocos que lean esto, y los que me conocen saben, mi relación terminó, dejándome solo. Mi afirmación no se refiere a esto, y es que dejé de ser un sujeto social en la vida. Básicamente tengo pocos partners. Sí, esos que te apañan y están contigo toda la vida. No, esos en mi vida no existen y es poco probable que existan. Lo más probable es que por mi culpa más que por la suya, porque me he dedicado a convertirme en un ermitaño desde que el mundo rosa se acabó. Porque no me he cansado de cometer errores desde que el mundo rosa se acabó. No señor, no me he cansado. Hasta ahora.

Cuando este capítulo empezó, el mundo era parecido a cuando estaba en la beforelife (no en el afterlife). Era parecido a esos días en los que me decían que tenía la mentalidad de una persona 4 años mayor a mí. Era parecido a esos días en los que la escuela era básicamente una pérdida de tiempo porque todo lo que deseábamos hacer era c0dear todo el día... Sí, tú algunas veces lo hiciste, y yo hoy lamento no haberlo hecho, porque podría haber logrado tanto.

El hecho es que esos días se esfumaron y ya c0dear no es lo mismo... o más probablemente lo que hago hoy no es c0dear, sino que codear, y simplemente la última es esclavitud frente a la primera, que es libertad.

Esos días que se esfumaron, hoy los clasificaría dentro del grupo de días que mejor lo he pasado en mi vida. Es cierto que existieron las penas de amor y que la frustración estaba presente. Pero había tantas otras cosas  que hacer o pensar que no existían esenciales en la vida. No existía frustración ni pena de tiempo completo, porque las otras actividades que hacía en ese tiempo me generaban tranquilidad conmigo mismo. La depresión no era tema. El tema era cómo resolver los problemas. Problemas que no eran del mundo real, sino del mundo virtual, ¡y qué problemas!

Hoy día el quehacer es claro, debo volver a esos días. Debo reaprenderme y reinventarme, sé que puedo hacerlo y que puedo lograrlo, porque la vida no es sólo la vida. Debo llegar al mismo nivel en el que estuve a los 13 y 17 años. Si lo logré antes, estoy seguro que podré hacerlo a los 22 ó 23. Debo volver al tiempo en donde existía algo en lo que derramar todo el talento que tengo para algunas cosas. Quizá no existan los partners nunca más, porque soy idiota. Pero siempre me tendré a mí mismo.

You're on your own, bro.

Para el que no se dio cuenta en un principio, la vida era la Universidad y la vida estudiantil. Saludos a Sindy Marín, que me enseñó que la literatura superficial era sólo eso, superficial. Cosa que sólo llegué a entender tras 4 años de estudiar en la Vida...

1 comentario:

  1. y bueno...

    menos mal que te sientes así, quizá eso signifique que tu alma quiere rejuvenecer. Es un muy buen augurio.
    Aprende a estar contigo mismo...

    y no po broda, siempre estaré pendiente de ti...uña y mugre igual que en la infancia, al igual como aquellos veranos que ibas pa san felipe y jugabamos a los buses y weas asi o cuando iba pa copiapo.

    ojalá que cambies las tristezas por sonrisas.
    i love you shushatumare!

    nos vemos :)

    ResponderEliminar